Gala anual
del la Real Federación Española de Judo y D.A. celebrada en el Comité Olímpico
Español (COE).
Se
entregaron más de un centenar de reconocimientos y premios. En definitiva,
reconocimientos por el esfuerzo personal y compromiso con el deporte que amamos.
Entre todos
ellos hubo espacio para los premios institucionales, los mas fríos, no digo que
no sean merecidos, digo que son los que menos emociones nos transmiten a los
deportistas. Luego estaban los reconocimientos a los maestros, profesionales y
deportistas por sus logros, por sus triunfos, aunque este se sujete
“únicamente” en años y años de perseverancia y entrega. Son los más
emocionantes, en ellos ves la grandeza de tus semejantes. Ahí estábamos
nosotros, entre los “altos Danes”. Y por último se entregaron los GRANDES; Los que
pusieron la Gala en pie. Mirian Blasco, Isabel Fernández y Yolanda Soler. Ningún
aplauso por grande y largo que sea, tendrá el tamaño de sus medallas olímpicas y lo que
el Judo les debe a ellas.
El discurso
final, la parte mas institucional del acto, corrió a cargo del presidente del
COE. Don Alejandro Blanco, quien tuvo
que recordar uno de los principios del Judo. El principio de la no resistencia,
el camino de la flexibilidad. Que la rigidez es la causante de las roturas. La
lucha de los “Egos” no debería tener cabida dentro de un deporte con los
pilares y valores que sujetan al Judo. Y el que no lo entienda así , es que esta dejando de entender el judo. Y tampoco entiende el daño que le está haciendo.
Enhorabuena
a todos los maestros, deportistas y recompensados en este año 2019: La
Competición, La Kata, El Arbitraje, El
Maestro, y por supuesto El Alumno que sube de cinturón. Grande y cada
día más grande es la disciplina en la que no se deja de aprender, ya que con
ello, no deja de crecer. Orgulloso de compartir este día con mi compañero y
amigo Tibor Kozma y ambos recibir junto
a otros ilustres, el 7º Dan de Judo.
Entre los
cientos de felicitaciones recibidas dentro y fuera del deporte, destaco una de
alguien que me dijo:
“uff,
séptimo Dan.!! Que se siente desde ahí arriba!!??!!”
a lo que
contesté: “vértigo, la verdad es que da algo de vértigo”.
Fran Nicolás.
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